jueves, 8 de noviembre de 2007

PARTICIONAR UN DISCO DURO: ¿ES CONVENIENTE? ¿CUANDO Y COMO SE DEBE HACER?.

Muchas veces hemos hablado de la conveniencia de tener el disco duro particionado. Vamos a ver en este tutorial hasta qué punto es esto conveniente, a partir de qué tamaño de disco debemos hacer particiones y cuando y como se deben hacer estas particiones. Ante algunas preguntas que me he encontrado en nuestro Foro de ayuda y que aclarar ante todo una cuestión: Un disco duro siempre tiene particiones, aunque sea una sola por la totalidad de su capacidad. Dicho esto, en los discos duros actuales, con una capacidad bastante grande, es conveniente tener varias particiones, sobre todo planteándonos este tema desde la perspectiva de tener una partición dedicada al sistema operativo y programas y otra u otras dedicadas a guardar nuestros datos. Pero con esto debemos tener mucho cuidado, ya que a la partición donde vamos a instalar nuestro sistema operativo y nuestros programas le debemos dar el suficiente espacio como para asegurarnos de que no vamos a tener la necesidad de ampliar esta. Un buen tamaño para esta partición podemos establecerlo en los 20GB para Windows XP y los 30-35GB para Windows Vista. Particiones de menor tamaño pueden causarnos algún que otro problema, ya que son muchos los archivos (independientemente de los que conforman el sistema operativo y los programas en sí) los que se instalan en esta partición, como los temporales (aunque algunos sí que se pueden forzar a otra partición sin problemas), archivos de intercambio, sesiones de restauración de sistema, actualizaciones, etc. A esto hay que añadir que son muchos los programas que recomiendan instalar parte de ellos en una partición diferente (como es el caso de Photoshop), e incluso programas que para su buen funcionamiento es conveniente que los datos se pasen a una partición diferente a la original, que es lo que ocurre con los programas de recuperación de datos. Precisamente una de las grandes ventajas que tiene este sistema de tener tanto los programas como el propio sistema operativo en una partición independiente es que si necesitamos formatear esta partición vamos a tener bien salvaguardados nuestros datos. Y es precisamente por este motivo por el que yo suelo aconsejar no guardar nuestros documentos (salvo los que no queramos que sean de acceso común) en la carpeta Documents and Setting o Usuarios (ver tutorial Guardar nuestros archivos en Mis Documentos). Otra cuestión que debemos considerar a la hora de hacer las particiones en nuestro disco es el tamaño que vamos a destinar a almacenar nuestros datos. Estas deben ser lo suficientemente amplias como para permitirnos guardar sin estrecheces toda nuestra información, así como una copia de algunos de los principales archivos del sistema y ejecutables de nuestros drivers. Ahora bien, ¿cuál es el número idóneo de particiones que debemos hacer?. Pues esto va a depender de varios factores, pero sobre todo del tamaño de nuestro disco duro. A veces vemos discos de 40GB con tres particiones. Esto es una exageración. Un disco de 40GB ya va corto para hacer dos particiones, ya que no nos permite hacer estas con un mínimo de tamaño que nos garantice que realmente van a cumplir bien con su misión. Por supuesto que discos más pequeños no es en absoluto recomendable hacer más de una partición, salvo que el uso que le demos a nuestro PC sea exclusivamente para trabajar con programas que generen datos de muy poca capacidad o que utilicemos un sistema operativo antiguo, como puede ser Windows 95, Windows 98 o incluso MS-DOS, que en todo caso necesitan mucho menos espacio que Windows XP o Windows Vista. También podemos hacer dos particiones en discos pequeños si utilizamos nuestro ordenador para conectarnos a Internet y muy poco más. En general podemos cifrar el tamaño mínimo deseable para datos en 60GB, lo que nos daría en un disco de 80GB 20GB para el sistema y 60GB para datos. En discos mayores podemos conservar esa relación, aumentando ligeramente la partición del sistema y más la dedicada a datos. A partir de 160GB ya podemos plantearnos hacer tres particiones, aunque hacer más particiones ya no tiene demasiado sentido. A veces se piensa que al tener el disco más particionado estamos protegiéndonos contra infecciones de virus. Esto es totalmente falso, ya que realmente la única partición en la que un virus va a ser peligroso es en la partición donde tenemos instalado el sistema, y en cuanto a las demás, como comprenderán un virus no tiene absolutamente ningún problema en saltar de una a otra una vez que se activa. Por otra parte, la idea de hacer una partición para guardar copias de seguridad no es una buena idea, ya que ante la pérdida de nuestro disco duro por una avería física del disco (que es el único motivo por el que realmente perderíamos nuestros datos de forma irrecuperable) también vamos a perder esta partición y en consecuencia los datos que contenga. Tampoco tiene mucho sentido forzar la instalación de programas en una partición diferente a la que utilizamos para el sistema, ya que en caso de tener que formatear o reinstalar este tenemos también que reinstalar los programas, estén en la partición que sea. Además hay muchos programas que sólo funcionan ofreciendo todas sus posibilidades si están instalados en la misma partición en la que se encuentra el sistema operativo. Bien, una vez visto lo anterior se nos plantea la siguiente cuestión: ¿Cuando se deben hacer las particiones?. En principio las particiones se deben hacer siempre desde el primer momento, es decir, que cuando tenemos el disco duro totalmente limpio debemos hacer una planificación de las particiones que vamos a utilizar y de su tamaño. Esto es posible hacerlo con todos los sistemas operativos que conozco, y desde luego con todos los sistemas operativos de Microsoft. Es cierto que el nuevo Windows Vista permite redimensionar las particiones con una cierta seguridad, pero que permita hacerlo no quiere decir que sea lo ideal. Por otro lado hay una serie de programas que permiten trabajar con las particiones del disco, como por ejemplo Partition Magic u otros similares, pero estos programas siempre entrañan un alto riesgo, ya que cualquier fallo, incluido un reinicio o fallo eléctrico, implica en la mayoría de los casos la pérdida de nuestros datos e incluso a veces la pérdida del disco. Aquí quiero hacer un inciso. En la actualidad prácticamente todos los ordenadores ''de marca'' traen una partición de recuperación en la que se encuentran tanto el instalador del sistema operativo como los drivers y programas en calidad de Bonus pack. Esta partición es conveniente mantenerla intacta en todo momento, ya que nos va a permitir restablecer nuestro equipo a su estado ''de fábrica'' en el caso de que necesitemos hacerlo o simplemente queramos hacerlo. Podemos ver más información sobre este tema en el tutorial Recuperar sistema desde disco de recuperación y en el tutorial Recuperación del sistema desde un disco o partición Recovery. Y por último vamos a tratar del tema de la instalación de varios sistemas operativos en un mismo disco. Si bien en principio no hay ningún inconveniente en hacerlo ¿es realmente la mejor solución?. Pues bajo mi punto de vista no lo es. Si pensamos instalar más de un sistema operativo es preferible, siempre que podamos, hacerlo en discos diferentes, ya que esto sí que nos va a garantizar la integridad de ambos sistemas, descartando de paso la posibilidad de quedarnos sin ordenador en el supuesto de un fallo físico del disco. Haciéndolo de este modo vamos a tener todas las ventajas de tener dos sistemas operativos sin prácticamente ninguno de sus posibles inconvenientes. Además, si tenemos en cuenta el costo de un disco duro en la actualidad y lo comparamos con el costo de un sistema operativo Retail, el costo es bastante bajo, ofreciéndonos además la posibilidad de comprar un sistema operativo OEM (al adquirirlo junto con un disco duro), con lo que en conjunto nos va a suponer un ahorro.